Así se revela en el tercer y último episodio de la serie documental 'La guerra en la sombra de Putin' y la serie de podcast 'Frente Frío'. La investigación ha sido realizada durante un año por las cadenas de televisión SVT, YIe, NRK y DR.

El 26 de septiembre de 2022 se registraron varias explosiones submarinas que dañaron los gasoductos del Nord Stream 1 y 2, que transportaba gas natural desde Rusia a Alemania a través del mar Báltico. Las explosiones provocaron hasta cuatro fugas cerca de la isla danesa de Bornholm y, por el momento, no se ha concluido quién estuvo detrás.

Por eso, el sabotaje a los gasoductos del Nord Stream sigue siendo un misterio sin resolver.

Bajo el apodo de 'James', un ex oficial de Inteligencia de la Marina Real británica explica en el tercer episodio de la serie documental que durante los últimos dos años y medio ha estado vigilando la flota del Báltico. En este tiempo se fijó en un barco en particular, el Sibiryakov.

Además de este buque de investigación naval ruso, hay otros dos barcos que despertaron su interés: el remolcador SB-123 y un tercero de la flota naval rusa que no se ha podido identificar por su nombre.

Estos tres barcos navales rusos tenían sus transmisores AIS apagados, lo que les convirtió en "barcos fantasma", pero las televisiones públicas nórdicas han accedido a las comunicaciones por radio enviadas desde los barcos a las bases navales rusas. Estas comunicaciones revelan cómo los tres barcos navegaron desde bases navales rusas que se encuentran en el mar Báltico hasta la zona alrededor de los lugares en los que se produjeron las explosiones del Nord Stream en junio y septiembre de 2022.

El SB-123 ya había levantado sospechas sobre el sabotaje del Nord Stream. Según fuentes de Inteligencia alemanas, este buque estuvo en la zona con hasta otras cinco embarcaciones rusas el 21 y el 22 de septiembre.

En los tres casos, los buques estuvieron en la zona donde se produjeron las explosiones del Nord Stream. Uno de ellos llegó solo cinco días antes de las detonaciones y, según las comunciaciones por radio, habría permanecido allí durante toda la noche del siniestro en el gasoducto antes de regresar a Rusia.
Las rutas de navegación de los buques rusos obtenidas gracias a la comunicación por radio interceptada están respaldadas además por imágenes de satélite que han sido analizadas por los cuatro medios de comunicación públicos nórdicos en colaboración con la compañía satelital noruega KSAT.

Gracias a estas imágenes de satélite, se demuestra que los barcos rusos han operado en los lugares en los que el ex oficial de Inteligencia británico tenía constancia. Sin embargo, esto no significa que se pueda concluir quién está detrás de las explosiones del Nord Stream, aunque sí se puede demostrar que unos meses antes de que se produjeran hubo en la zona varios barcos rusos. 

Así lo señala el periodista de investigación de DR Niels Fastrup, que recuerda que, si bien la investigación conjunta sitúa a estos tres buques rusos cerca de la zona donde explotó el Nord Stream, "no significa que podamos concluir nada sobre quién está detrás".

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